Así funcionan los embargos dependiendo del préstamo hipotecario

Esto es todo lo que necesitas saber sobre embargos, en qué casos se dan y el proceso una vez iniciado el trámite. Lo más habitual es que suceda cuando dejas de pagar la cuota de la hipoteca 12 meses consecutivos, como mínimo. Sin embargo, hay opciones para evitar el embargo.

¿En qué consiste el proceso de embargo y desahucio de una vivienda?

El embargo es el trámite a través del cual el banco se queda con la propiedad hipotecada, lo que tiene lugar como consecuencia del impago de las cuotas de la hipoteca, mientras que el desahucio de una vivienda es el proceso a través del cual la Administración correspondiente obliga a los residentes a abandonar el inmueble cuando este ha sido ya embargado, siempre que estos no se hayan marchado por voluntad propia después de que se lleve a cabo el embargo.

¿Cuánto tarda un desahucio por impago de hipoteca?

Aunque se tiende a pensar que el proceso de desahucio es rápido, este solo se lleva a cabo después de un proceso largo y que cuenta con varias fases. En este sentido, para que se pueda producir el desahucio por impago debe llevarse a cabo un proceso que cuenta con varias fases. Entre ellas, la demanda judicial, que se ejecuta después de 12 impagos (en el caso de estar pagando la primera mitad del préstamo) o de 15 impagos (en el caso de estar pagando la segunda mitad del préstamo).

¿Cuántos meses de impago de hipoteca son necesarios para un desahucio?

Hay que tener en cuenta que los impagos se corresponden con las cuotas de la hipoteca, que son mensuales. Por tanto, para que se pueda producir un desahucio es necesario que, por lo menos, hayan pasado 12 o 15 meses (según el tramo del préstamo que se esté pagando) desde que se haya producido el primer impago. Además, hay que tener en cuenta que cuando se ejecuta la demanda judicial se inician otras fases del proceso de desahucio, por lo que la ejecución del mismo todavía se puede alargar más dependiendo de lo que tarden en llevarse a cabo las siguientes fases del proceso.

¿Cuál es el proceso de embargo y desahucio de una vivienda?

Para entender correctamente si te pueden embargar una casa hipotecada, así como en qué momento se realizaría el desahucio, es importante entender el proceso en su conjunto. Este se puede dividir en 8 pasos bien diferenciados:

Aviso de impago

Se lleva a cabo después de que hayan pasado 15 días desde el primer impago. En este caso, el banco se pone en contacto con el titular de la hipoteca para informarle de que se ha producido el impago y para preguntar si está al corriente de este hecho. Se trata de un aviso no oficial.

Comunicaciones oficiales

Después de un mes de impago, la entidad bancaria iniciará las comunicaciones oficiales. Es decir, avisos más formales y que se pueden recibir a través de cartas, SMS al teléfono móvil, correos electrónicos, etc. En estas comunicaciones el banco notificará del problema y de la importancia de que se le ponga solución lo antes posible.

Entrada en mora

La siguiente fase se denomina entrada en mora, y tiene lugar cuando han transcurrido 5 meses de impagos. En este caso, el deudor pasa a entrar en las denominadas listas de morosos, lo que tiene importantes implicaciones a nivel crediticio.

Demanda judicial o notarial

Finalmente, cuando hayan transcurrido 12 o 15 impagos (dependiendo de si se está abonando la primera o la segunda mitad del préstamo) la entidad bancaria empezará con la ejecución del proceso de embargo propiamente dicho. Este proceso se inicia con la presentación de una demanda ante el juzgado o con un requerimiento ante notario. Para poder hacerla efectiva, el banco debe dar al titular de la hipoteca al menos un mes por si este quiere y puede ponerse al día de los pagos, lo que implicaría la cancelación del proceso.

Registro de las cargas sobre la propiedad

La siguiente fase es el registro de las cargas sobre la propiedad. Es decir, se solicita al Registro de la Propiedad que haga oficial las cargas que existen sobre la vivienda.

Convocatoria de subasta

A continuación, se procede a anunciar la fecha, la hora y el precio de salida a subasta del inmueble, lo que se anuncia en el Tablón de Anuncios del Ayuntamiento, así como en el Registro de la Propiedad y de los juzgados. Esta convocatoria no se tiene que avisar de forma específica al hipotecado, por lo que es importante que sea el titular de la hipoteca quien esté atento a dicha convocatoria.

Celebración de la subasta

En el momento anunciado tiene lugar la celebración de la subasta. A través de ella, se subasta la vivienda y se recauda dinero con el fin de hacer frente a la deuda de la hipoteca. De este modo, el inmueble se adjudica al mejor postor. Además, hay que tener en cuenta que, en el caso de que no haya ofertas superiores al precio mínimo estipulado, será el propio banco quien se pueda quedar con la casa por el 60% de su valor. Cuando se produce la subasta es cuando, de facto, se produce el embargo y el hipotecado pierde la propiedad de la vivienda. Sin embargo, esto no significa que salde su deuda con el banco. Para saldar la deuda con el banco será necesario que el precio de venta de la vivienda en la subasta sea igual o superior a la deuda contraída. En el caso de no ser, el hipotecado seguirá debiendo al banco la parte restante.

Lanzamiento o desahucio

Una vez que se ha completado la subasta y el deudor ha perdido la propiedad del inmueble, se le invita a abandonar la vivienda. Si este no la abandona voluntariamente, se inician los trámites para la ejecución del desahucio. En este caso, el juzgado es el que señala la fecha y la hora en el que el nuevo propietario (que puede ser el banco) acudirá con una comisión judicial y un cerrajero para realizar la toma del inmueble y el cambio de cerradura. En algunos casos, este proceso se realiza acompañado de presencia policial.

¿Te pueden embargar una casa hipotecada si pagas la deuda atrasada?

Como hemos visto, el proceso de embargo y desahucio de una casa hipotecada es largo y cuenta con diferentes pasos a lo largo del proceso. En este sentido, es importante tener en cuenta que, al menos hasta que se produzca la celebración de la subasta, el deudor puede detener el proceso. ¿Cómo? Realizando los pagos atrasados de los impagos, lo que incluirá, además de las cuotas correspondientes, los intereses asociados a los retrasos por impago.

La importancia de escoger una hipoteca acorde a nuestra capacidad económica

Para evitar problemas, es imprescindible escoger una hipoteca adecuada a nuestra situación y a nuestra capacidad económica real. Conocer la casa que nos podemos permitir nos ayudará a saber qué tipo de hipoteca se ajusta mejor a nuestro perfil y, de este modo, no contratar productos hipotecarios que estén por encima de nuestras posibilidades y que puedan llevarnos a situaciones de impago que, desgraciadamente, puedan desembocar en un proceso de embargo y de pérdida de la casa.

 

Fuente: www.idealista.com

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