Los bancos suelen incluir seguros en los productos que ofrecen, a pesar de ser un servicio ajeno a su actividad habitual. Sin embargo, estos seguros adquiridos mediante el banco podrían derivar en situaciones complicadas.
Las tarjetas de crédito y débito disponen de una gran variedad de ventajas. Aunque para muchos clientes lo más interesante es evitar pagar comisiones, mantenimiento o extras por los que pagar más cada mes, también puede ser interesante conocer otros beneficios. La mayoría de bancos ofrecen a los usuarios descuentos en sus compras habituales, adquisiciones online o incluso servicios. Por ejemplo, muchas sirven para ahorrar en los principales gastos de vacaciones como los vuelos, los restaurantes o los alojamientos.
Otro beneficio que pocas personas conocen son los seguros asociados a las tarjetas de crédito. De hecho, en muchos casos pueden servir para evitar adquirir por duplicado los seguros comunes como el fallecimiento, los viajes o protección de compras. Sin embargo, existen algunas excepciones. Estas coberturas no comprenden situaciones de responsabilidad civil, es decir, los accidentes de tráfico, siniestros ocurridos bajo los efectos de alcohol, drogas u otros estupefacientes así como pérdidas de equipaje o cancelación de vuelos si no se especifican. Aunque los detalles suelen ir indicados en el contrato con el banco o en las aplicaciones de la firma, veamos algunas de las más cotidianas.
Muchos bancos disponen de sus propias compañías aseguradoras, por ello las tarjetas de créditos suelen estar protegidas con distintos seguros. Aunque suelen pasar desapercibidas, es importante revisar a fondo nuestros contratos para poder disfrutar de las mismas. La clase de coberturas incluidas depende del tipo de tarjeta, además, en la mayoría de los casos se trata de un servicio gratuito para el titular. Igualmente, desde Bankinter apuntan que el coste de estas pólizas se incluya en la comisión de mantenimiento.
Seguros de viajes
En muchos casos cubrirán desde retrasos o cancelaciones de vuelos hasta el extravío o deterioro del equipaje, señalan desde Reclamador. Además, también es posible disfrutar de una compensación por anulación del propio viaje. Cabe destacar que la cobertura se aplicará cuando los pagos de este mismo viaje se hayan realizado desde la tarjeta correspondiente. Si surgen otros imprevistos como enfermedades o emergencias, es muy posible que también estén cubiertos para el titular y sus acompañantes familiares.
Coberturas de vida o fallecimiento
En todo caso buscarán cubrir los créditos pendientes en una tarjeta cuando se produzca el fallecimiento de su titular. Las coberturas más amplias, por lo general de tarjetas más exclusivas, también incluyen otras protecciones e indemnizaciones adicionales a los familiares.
Fraudes, robos y protección de compras
Muchos de estos seguros están pensados para las compras, por lo que es habitual que dispongan de algún tipo de cobertura en caso de fraudes, estafas, atracos o robos que se cometan por parte de terceros. Esto puede ser desde la clonación de tarjetas o compras fraudulentas hasta incidencias en los pedidos que nunca llegan, duplicación de pagos o incluso cargos sin permiso del titular. Asimismo, también se protegerá al cliente si pierde la tarjeta o se la roban, de manera que será más sencillo recibir un duplicado sin tener que pagar extras. Al tratarse de delitos, lo más importante es contactar con el banco y, cuando sea necesario, poner una denuncia en la autoridad policial o judicial.
Fuente: www.lainformacion.com
