El seguro de vida no tiene por qué ser solo para hipotecados, realmente es una inversión para todo aquel que quiera un futuro seguro y tranquilo.
Un seguro de vida es un producto asegurador que ofrece una protección económica en caso de que ocurra una incidencia de salud grave o un accidente, ya que cubre el riesgo de fallecimiento y de incapacidad permanente absoluta del asegurado de la póliza. Por tanto, su objetivo es otorgar a los familiares y al propio asegurado un soporte económico cuando alguno de estos sucesos se produzca.
Un seguro de vida «ofrece la tranquilidad de saber que pase lo que pase, una familia va a poder mantener el nivel de vida durante el tiempo necesario para readaptarse a la nueva situación, algo que es especialmente importante cuando existen deudas o un préstamo hipotecario». Son las palabras de José Manuel Veiga, director de Seguros de Protección de BanSabadell Seguros, en las que el experto resume dónde radica la importancia de este tipo de producto.
«De media, se necesitan unos cinco años para que una familia se recupere económicamente tras la pérdida de uno de sus miembros, y en este tipo de cosas todos debemos pensar en proteger a los nuestros y a uno mismo», añade Veiga. Se estima que la mitad de la población española tiene contratado este tipo de seguro.
¿Qué cubre un seguro de vida?
Es fundamental que el seguro de vida se ajuste a las necesidades de cada familia, teniendo en cuenta diversos factores como el número de integrantes, la edad y el estado de salud de cada uno de ellos, así como la solvencia económica.
En el mercado existen pólizas de vida que ofrecen un amplio abanico de coberturas. «La principal cobertura de cualquier seguro de vida es la de fallecimiento. Pero igual de importante es disponer de la cobertura de incapacidad permanente absoluta, ya que esta imposibilita al afectado a seguir desarrollando con normalidad su actividad profesional y personal e incluso puede requerir gastos adicionales para la nueva situación, como adaptar la vivienda», afirma el director de Seguros de Protección de BanSabadell Seguros. Es el caso del seguro Life Care de BanSabadell Vida, que además del fallecimiento, cubre la incapacidad permanente absoluta, ya sea por accidente o por enfermedad.
Algunos de estos seguros anticipan capital en el caso de padecer enfermedades graves como, por ejemplo, el cáncer. Este dinero ayuda al asegurado a costear tratamientos médicos, así como servicios necesarios para el día a día, que de otra forma no se podría permitir. Supone también una importante ayuda para la economía familiar, ya que es probable que ante este tipo de situaciones el asegurado no pueda realizar su actividad profesional. Además, están incluidos los servicios de orientación médica las 24 horas del día, la opción de solicitar una segunda opinión médica internacional siempre que se necesite a través de diagnósticos contrastados, la atención por parte de un equipo de psicólogos o un asesoramiento personalizado sobre nutrición, alergias y alimentación infantil.
Otros beneficios de los seguros de vida
Además de proteger económicamente a la familia del asegurado tras el fallecimiento, de poder hacer frente al pago de una hipoteca o de un préstamo, de garantizar el futuro de los hijos, de cubrir el potencial riesgo de sufrir una incapacidad permanente absoluta, o de estar protegido ante enfermedades graves o un accidente inesperado, como uno de tráfico, los seguros de vida ofrecen otros importantes beneficios para los clientes.
Por ejemplo, cuando alguien fallece, además de los posibles pagos pendientes, hay que tener en cuenta que tanto el sepelio como los servicios asociados a este suelen suponer un gasto elevado. Gracias a este producto, algunos servicios se podrían cubrir, incluso sin haber contratado un seguro de decesos. En esta línea, y según la comunidad autónoma en la que se resida, tras el fallecimiento hay que liquidar el impuesto sobre donaciones y sucesiones para poder disfrutar de la herencia, y el dinero de la póliza de vida puede ayudar a solucionar este trámite, que puede llegar a ser ciertamente gravoso en algunas regiones.
Con todo, a la hora de contratar un seguro de vida, es aconsejable contar con el apoyo del gestor de la entidad bancaria, ya que informará sobre el producto que más se ajusta a las necesidades de cada persona y responderá cualquier duda que pueda surgir.
Fuente: www.eleconomista.es