El seguro de vida es muy importante ante ciertas circunstancias, como el fallecimiento o una situación de invalidez. Por eso, es importante tener en cuenta la salud y saber qué pasa si te diagnostican una enfermedad después de contratar el seguro de vida.
¿Qué tienen que ver las enfermedades con el seguro de vida?
Cuando firmamos el contrato del seguro de vida, la compañía previamente debe valorar el riesgo que asume por ello. Como probablemente ya sepas, habitualmente la finalidad del seguro de vida es pagar una cantidad de dinero a tus seres queridos si falleces. O bien, esa cantidad será para ti mismo si te ocurre algo que te incapacita de forma permanente.
Es decir, que cuanto mayor sea la probabilidad de que fallezcas, mayor será el riesgo que asume el seguro. Además, se trata de una cuestión determinante en lo que se refiere a la prima que tendrás que pagar por el seguro. Ésta también será mayor si el riesgo asumido por el seguro es más elevado.
En este sentido, la salud tiene un papel fundamental, pues es uno de los principales indicadores del riesgo que tienes de morir. Es por eso que los seguros de vida normalmente someten a los asegurados a un cuestionario de salud. Con ello pretenden averiguar qué riesgo hay de firmar un seguro de vida contigo. Según sean los resultados de este cuestionario de salud, así será el precio que pagues por el seguro de vida.
Sin embargo, puede ocurrir que en el momento de responder al cuestionario de salud, o de firmar el seguro de vida, no padezcas una enfermedad, o aún no sepas que la tienes.
¿En qué casos comunicar que se padece una enfermedad?
Antes de contratar el seguro de vida
Como ya hemos dicho, antes de contratar el seguro de vida seguramente tengas que responder a un cuestionario respecto a tu estado de salud. No obstante, debes saber que si la aseguradora no te pregunta si padeces alguna enfermedad, no estás obligado a decirlo. Es decir, no es responsabilidad tuya no haber respondido a algo por lo que no te han preguntado, si no de la aseguradora.
Pero en el caso de que te pregunten por ello, no deberías mentir al respecto. Si contratas el seguro de vida habiendo mentido sobre tener una enfermedad, por la que se te ha preguntado, podría ser motivo para invalidar el contrato.
De hecho, padecer una enfermedad y no comunicarlo, puede ser perjudicial para ti. Puede que la prima que pagues sea más barata, pero quizá las coberturas no sean las adecuadas para tu situación. Además, la aseguradora también puede llevar a cabo un chequeo médico en el que compruebe tu estado de salud.
¿Qué pasa si te detectan una enfermedad en el chequeo médico?
En algunos casos, las compañías de seguros pueden realizarte chequeos médicos para comprobar tu estado de salud. Por tanto, puede ocurrir que tengas una enfermedad y lo desconozcas.
En este caso, simplemente la aseguradora lo tendrá en cuenta para ajustar el precio según ese riesgo.
¿Qué pasa si te detectan la enfermedad después de haber contratado el seguro de vida?
Si esto ocurre, es la ley la que establece lo que se debe hacer. Según El artículo 11 de la Ley 50/1980, de 8 de octubre, de Contrato de Seguro, tras su modificación por la Ley 20/2015, de 14 de julio, de ordenación, supervisión y solvencia de las entidades aseguradoras y reaseguradoras:
“1. El tomador del seguro o el asegurado deberán durante la vigencia del contrato comunicar al asegurador, tan pronto como le sea posible, la alteración de los factores y las circunstancias declaradas en el cuestionario previsto en el artículo anterior que agraven el riesgo y sean de tal naturaleza que si hubieran sido conocidas por éste en el momento de la perfección del contrato no lo habría celebrado o lo habría concluido en condiciones más gravosas.”
“2. En los seguros de personas el tomador o el asegurado no tienen obligación de comunicar la variación de las circunstancias relativas al estado de salud del asegurado, que en ningún caso se considerarán agravación del riesgo.”
Por tanto, según la ley, no tienes obligación de comunicar si te diagnostican una enfermedad después de contratar el seguro de vida. Tal y como dice la ley, las cuestiones relativas al estado de salud no se consideran una agravación del riesgo. Esto es así porque según pasa el tiempo, aumentan las probabilidades de morir que tiene una persona. Es decir, con el tiempo es completamente normal padecer algún tipo de enfermedad debido a la edad. Sin embargo, sí sería una agravación de riesgo empezar a practicar un deporte peligroso, como puede ser el paracaidismo.
De modo que, a no ser que te pregunten en el cuestionario de salud, o te hagan un chequeo médico, no tienes obligación de decir que te han diagnosticado una enfermedad.
En cualquier caso, no te aconsejamos esperar a tener una enfermedad para contratar el seguro de vida. Te recomendamos que acudas al comparador de seguros de vida para ello. Así, podrás ver qué opciones ofrece cada uno, y cuál te interesa más en función de tus necesidades y tus posibilidades. Si quieres ahorrar a la vez que aseguras tu futuro y el de los tuyos, esta es la mejor forma de hacerlo y la más sencilla ?✅?